La justicia federal puso fin a la polémica entre el municipio de Puerto Iguazú y la firma Crucero del Norte. Le dio la razón a la firma y conminó a la comuna a abstenerse de controlar, fiscalizar y sancionar a los servicios internacionales de la mencionada transportista. Desde hace más de un mes que inspectores de Puerto Iguazú sistemáticamente impedían la normal prestación del servicio por entender que estaban haciendo un servicio urbano y para ello deberían tener una autorización municipal.
Una polémica que estaba afectando al turismo en Puerto Iguazú se resolvió hoy mediante un fallo de la justicia federal que ordenó al municipio a abstenerse de controlar a las unidades de la empresa Crucero del Norte que prestan servicio internacional entre la ciudad de las Cataratas y su vecina brasileña Foz.
El servicio se prestaba sin inconvenientes desde 2005, pero en los últimos meses sufrió inconvenientes a raíz de operativos de inspección del municipio. En un principio, los agentes se limitaban a exigir documentación y emitir multas, pero en las últimas semanas también obligaban a los pasajeros a bajar de la unidad y los dejaban a la vera de la ruta, en el acceso al Parque Iguazú.
Desde el municipio argumentaban que la empresa se valía de su operación de transporte internacional para prestar también un servicio urbano para el que no estaba habilitada. De acuerdo a la versión del municipio, la empresa levantaba pasajeros en la terminal Iguazú y los llevaba hasta el Parque Nacional Iguazú del lado argentino, lo cual implicaría un recorrido urbano.
Representantes de Crucero del Norte siempre negaron que estuvieran haciendo transporte urbano y aseguraron que todos los pasajeros que descienden en algún punto de Puerto Iguazú suben en Foz y todos los que se suben al colectivo en cualquier punto de la ciudad argentina bajan en Brasil.
Disconformes con las constantes intervenciones de los inspectores municipales que directamente impedían la prestación del servicio, Crucero del Norte recurrió a la justicia federal, que hizo lugar al reclamo de la prestataria a través de una medida autosatisfactiva mediante la cual ordenaron al municipio que se abstenga de ejercer actividades de contralor, fiscalización y sancionatorias a las líneas internacionales de la empresa, en tanto funcionan bajo órbita nacional y su control corresponde a la Comisión Nacional Reguladora del Transporte (CNRT).
Declaró inválidas todas las actas labradas por los inspectores municipales y dispuso que el municipio restituya las tres unidades que secuestró e impuso las costas procesales al municipio de Puerto Iguazú.