El fiscal Santiago Bridoux, que investiga la masacre a una familia en Santiago del Estero, informó que el asesino usó dos pistolas y que incluso tenía un cargador extra en el bolsillo. El homicida fue identificado como Nicolás Ábalos, quien era policía y en la madrugada del viernes mató a su beba de un año y a su exsuegra. Además, le disparó a su expareja, Lorena, que está grave. Después del ataque, se quitó la vida en la entrada de la casa.
“Disparó con las dos armas, por eso había dos calibres en el lugar. En las primeras horas de la madrugada trabajamos en dos hipótesis, pero efectivamente fue él”, aseguró Bridoux, y explicó que al comienzo pensaron que fue un fuego cruzad”.
Sobre el momento del ataque, el fiscal detalló que Ábalos entró a la casa de Lorena “rompiendo la puerta”. Luego de esto, ella “volvió pidiendo auxilio a la casa de sus padres, cerró la puerta y dijo que Nicolás venía con el arma. De repente, él rompió la puerta y acribilló a toda la familia”.
“Testigos vieron que le disparó al hijo de 9 años, que salió solo con lesiones en la pierna y está fuera de peligro. El nene logró escapar y se cubrió detrás de un auto, mientras que Nicolás volvió a la casa y se pegó un tiro en la cabeza”, precisó el fiscal.
Bridoux explicó que Ábalos había sido denunciado en 2021, después de separarse de Lorena: “Él la había amenazado con matarla si no volvían. En la denuncia decía que no le había levantado la mano, pero tenía miedo”.
“Se lo excluyó del lugar y estuvo con perimetrales. Ellos habían retomado la pareja y hace poco se habían vuelto a separar. Todavía se está investigando cuál fue el detonante”, señaló el funcionario judicial.
Los investigadores secuestraron dos armas en la escena del hecho, una 9 y una 45 milímetros, que pertenecían al agresor: “Entendemos que su decisión era matar a toda la familia”, afirmó Bridoux
Así fue la masacre
Nicolás Ábalos vivía en la casa que la pareja había compartido cuando aún estaban juntos, ubicada en diagonal al domicilio de los papás de la mujer. Lo que se sabe es que esa noche Lorena salió corriendo de la casa de Ábalos y cruzó la calle para pedir ayuda. Allí comenzó a pedirle auxilio a sus padres porque el policía la perseguía con una pistola en la mano. Segundos después, el agresor ingresó a la vivienda luego de derribar la puerta a patadas y desató una feroz balacera.
Aún no se sabe en qué orden comenzó a balear a las víctimas, pero en medio de la masacre, mató a su beba y a su exsuegra, Olga Cuellar (62), quien trató de ocultarse detrás de una puerta. Además, baleó en la cara a su expareja y a su exsuegro, Víctor Navarro (64). Su hijo de 9 años también sufrió heridas.
Poco después, Ábalos salió hasta la vereda a buscar al nene, que había escapado corriendo de la casa, y vio a un vecino que al escuchar las detonaciones había salido a la vereda. En ese momento, el agresor levantó el arma y le apuntó, pero el hombre logró esconderse en su vivienda. Tras ello, el atacante se dirigió a la puerta del almacén de sus exsuegros y se disparó en el mentón. Murió en el acto.