Pese al swap con EE.UU., no se logró calmar la presión sobre el dólar y rozó los $1.500 en el Banco Nación

Dia uno
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La demanda por cobertura cambiaria se mantuvo firme a seis días de las elecciones. El presidente Javier Milei denunció que “harán todo lo posible por generar pánico con el dólar”

Ni el anuncio del swap de monedas entre el Banco Central y el Tesoro de Estados Unidos ni la cuarta intervención consecutiva del Tesoro norteamericano lograron calmar la presión sobre el dólar en la recta final hacia las elecciones legislativas del 26 de octubre.

Este lunes, la divisa rozó los $1.500 en el Banco Nación y el tipo de cambio mayorista subió $25 (+1,7%), hasta $1.475, apenas un 1,1% por debajo del techo de la banda cambiaria, fijado en $1.490,60.

La fuerte demanda de cobertura preelectoral volvió a dominar el mercado, mientras los operadores reportaron ventas puntuales vinculadas al Tesoro de EE.UU., que solo consiguieron alivios temporales.

“La demanda por cobertura continúa sostenida, y así lo refleja un dólar mayorista por encima de los $1.470 que sólo intercala respiros ante las intervenciones de Bessent, las cuales ya no logran correr a la demanda privada, sino apenas morigerar el reacomodamiento al alza de la divisa”, explicó el economista Gustavo Ber.

Desde ABC Mercado de Cambios detallaron que el billete “llegó a marcar máximos intradiarios de $1.481” y que tras una leve oferta al mediodía “retomó rápidamente la tendencia alcista hacia el cierre”. El volumen operado se desplomó a u$s393 millones, el nivel más bajo en semanas, reflejando la retracción de la oferta privada.

Firme dolarización pese al swap con EE.UU.

El anuncio de la firma del primer capítulo del swap con el Tesoro estadounidense, liderado por Scott Bessent, no logró frenar la corrida cambiaria. El acuerdo, de hasta u$s20.000 millones, había sido presentado por el Gobierno como una herramienta clave para fortalecer las reservas y estabilizar el tipo de cambio.

Sin embargo, según analistas del mercado, la medida no alcanzó para contener la dolarización de carteras.

“Con solo cinco ruedas hasta las elecciones de medio término, el mercado entra en zona de alta tensión. La demanda de dolarización del retail, típica de los períodos preelectorales, se acelera. Es normal que en los meses previos a los comicios la formación de activos externos se duplique”, explicaron desde Portfolio Personal Inversores (PPI).

“Ni siquiera la intervención del Tesoro norteamericano logra frenar del todo esta dolarización de carteras”, agregaron. En esa línea, el economista Christian Buteler advirtió que los pesos provienen de los ahorristas que desarman plazos fijos:

“Los plazos fijos muestran una caída de $2,4 billones en la primera quincena de octubre, cuando deberían crecer al ritmo de la tasa que devengan”, sostuvo.

El dólar minorista cerró a $1.495 en el Banco Nación, mientras que los dólares financieros acompañaron la tendencia:

  • Blue: subió $20 y se ubicó en $1.505.
  • MEP: avanzó 0,6% a $1.550.
  • Contado con Liquidación (CCL): trepó 1,5% hasta $1.566,29.
  • Cripto: se negoció a $1.549,18.

En el mercado de futuros, todos los contratos operaron al alza, pese a señales de intervención oficial. Para fin de año, los inversores “pricean” un tipo de cambio de $1.650.

Milei apuntó contra “operaciones de pánico”

Ante la escalada cambiaria, el presidente Javier Milei utilizó sus redes sociales para advertir sobre lo que consideró maniobras políticas destinadas a generar miedo en el mercado.
“TÉNGASE PRESENTE. Fin”, escribió al retuitear un posteo del economista Federico Domínguez, quien aseguró que “esta semana harán todo lo posible por generar pánico e intentar que el dólar sea tapa de los diarios”.

En el mensaje replicado por Milei, Domínguez enumeró: “Habrá mentiras: que el Tesoro de EE.UU. le suelta la mano al Gobierno, que tras la elección se terminan las bandas y habrá una gran devaluación, que el Gobierno gastó muchos dólares en intervenir, que los pagos de deuda están en riesgo, y mucho más”.

“En lo político, las operaciones pueden ser aún más grandes. La realidad es que en diciembre el Gobierno y sus aliados verán reforzada su capacidad para defender el equilibrio fiscal. El programa monetario es sólido, porque hay un BCRA capitalizado, pocos pesos y superávit fiscal”, completó el analista.

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