El espacio Ciudadanos Unidos, liderado por Martín Lousteau, realizó su cierre de campaña en el barrio porteño de La Boca. El senador y la candidata al Senado Graciela Ocaña apuntaron contra la política económica del presidente Javier Milei y denunciaron la falta de planificación, la desprotección sanitaria y el avance del narcotráfico en la política.
En el tramo final de la campaña electoral, el espacio Ciudadanos Unidos, encabezado por Martín Lousteau, realizó este miércoles su acto de cierre en La Boca, con un mensaje enfocado en cuestionar el rumbo económico del gobierno de Javier Milei y en presentar propuestas centradas en la salud, la educación y la seguridad ciudadana.
Acompañado por Graciela Ocaña, quien lidera la lista de candidatos al Senado, Lousteau brindó un discurso cargado de críticas hacia el oficialismo, al que acusó de actuar “sin planificación” y con una lógica de gestión “cruel y desordenada”. “Tenemos un presidente que todos los días mira el valor de los bonos, el de su criptomoneda y el de los contratos de sus allegados. Pero lo que no mira es cómo viven los argentinos”, expresó el senador radical durante el acto, que combinó intervenciones presenciales y audiovisuales.
Lousteau también apuntó contra la visión económica del mandatario y su dependencia del auxilio internacional: “El presidente cree que el Estado es lo peor y que hay que destruirlo, pero cuando tiene problemas va corriendo al Estado de los Estados Unidos. Dice que vamos a ser una superpotencia en 20 años, pero su actuación afuera fue la de una república bananera, y nosotros no somos eso”. En ese sentido, sostuvo que el acuerdo financiero con el país norteamericano no beneficia a los ciudadanos, sino que representa “un rescate de último momento para cubrir los agujeros de deuda”.
En otro pasaje de su discurso, el dirigente de la UCR vinculó la situación actual con crisis anteriores: “No es la primera vez que pasa, ya lo vivimos con Macri y Caputo. Se repite el mismo modelo: endeudamiento, ajuste y una Argentina que no despega”. Lousteau insistió en la necesidad de “reconstruir el Estado con transparencia, sin corrupción y con sensibilidad social”.
Por su parte, Graciela Ocaña centró su intervención en la defensa de los jubilados y la salud pública, dos temas que considera “abandonados por el gobierno nacional”. “Queremos garantizar la cobertura de medicamentos para los adultos mayores y agravar las penas por delitos contra personas mayores. Hay recursos para hospitales como el Garrahan, pero lo que falta es vergüenza de parte del gobierno”, manifestó.
La candidata también denunció el desvío de fondos públicos y el financiamiento del narcotráfico en la política. “Mientras se destinan recursos a campañas electorales, los niños y los profesionales de la salud siguen desprotegidos. El narcotráfico infiltrado en la política es un problema grave que no podemos naturalizar”, señaló Ocaña ante un auditorio colmado de militantes y dirigentes del espacio.
El acto también contó con la presencia de Martín Ocampo, presidente de la UCR Capital, y de Piera Fernández, expresidenta de la Federación Universitaria Argentina, ambos candidatos en las listas de Ciudadanos Unidos. Fernández, una de las voces más jóvenes del espacio, pidió la creación de un acuerdo educativo nacional y la implementación de un plan integral de salud mental. “La escuela tiene que volver a formar, reducir el ausentismo y garantizar ambientes seguros y libres de violencia. No podemos mirar para otro lado: hay otra manera de construir el futuro”, afirmó.
Ocampo, en tanto, abordó la problemática de la inseguridad y la necesidad de adaptar las fuerzas de seguridad a los desafíos del presente. “La inseguridad limita la libertad de los ciudadanos. Tenemos que crear una ciberpolicía especializada, enfocada en la prevención y no solo en la persecución. Los argentinos necesitan protección frente a la creciente amenaza del ciberdelito”, sostuvo.
Durante el cierre, los dirigentes remarcaron que su propuesta busca ofrecer una alternativa “racional y responsable” frente al oficialismo. “No se trata de gritar más fuerte ni de destruir todo lo que existe, sino de construir un Estado que sirva a la gente”, resumió Lousteau, mientras agradecía el acompañamiento de los militantes y reafirmaba el compromiso de su espacio con “la recuperación de una Argentina más justa, moderna y humana”.
Con ese mensaje, Ciudadanos Unidos concluyó su campaña en un tono de confrontación con el Gobierno, apostando a captar el voto de los sectores moderados y desencantados con la gestión actual. En palabras de sus referentes, el desafío electoral será también una disputa por el sentido del cambio: “Demostrar que transformar no significa destruir, sino mejorar lo que tenemos con trabajo, empatía y futuro”.