Caminado por la orilla del río y el sol hasta el Parque de la Cantera llegaron en tradicional caravana los bailarines y bailarinas de las distintas escuelas y ballets de danzas. Polleras con flores y trenzas, las paisajes, y los sombreros altivos de los gauchos ingresaron a las 19.30 para encender con su presencia la primera antorcha del 56º Festival Nacional de la Música del Litoral y 18º del Mercosur.
Se prendieron también las luces del escenario principal en altura y los locutores dieron la bienvenida a los artistas y a los vecinos que se acercaron de a poco al lugar en una jornada de mucho calor.
Patricia Gaona abrió el telón con los ritmos litoraleños, su voz evocó en cada pieza el paisaje misionero y modo de ser de la gente de la tierra roja.
Al son de las guitarras y el acordeón bajó el duende de la noche a la Costanera. Patricia relató que hace poco volvió a vivir a la provincia después de años de residir en Buenos Aires.
“Me encanta estar en el Festival del Litoral y encontrarme con tantos amigos y con ustedes”, dijo la artista antes de interpretar una canción de Fermín Fierro que integrará su nuevo álbum.
A la hora del chotis las parejas se pusieron a bailar y se abrazaron con la poesía de Lucerito Alba.
Los Encina en sus distintas generaciones emocionaron y despertaron sapukay con los versos chamigos.
Pena y Olvido y otros himnos de la tierra guaraní para que la gente de ley aplauda y meta taco y suela, taco y suela. “Bien por esos sapukay” celebraron los musiqueros.
“Gracias por los sapukay, gracias por venir, gracias porque salga en festival en un momento tan difícil de crisis. Un aplauso fuerte a todos los que hacen posible este festival”, relató Nito Encina, que presentó a Leni Duarte, Rafael Encina y Nicolás Encina.
Las palmas se hicieron escuchar con el ingreso del maestro Moni Encina.