La contaminación del río Paraná en San Pedro, agravada por décadas de gestión inadecuada de residuos cloacales, ha desatado una crisis ambiental con repercusiones legales y sociales. La inactividad de la planta de tratamiento y el vertido directo de efluentes al río ponen en riesgo el ecosistema local y la salud pública, mientras la justicia federal investiga responsabilidades.
Las aguas del río Paraná frente a San Pedro, a 140 kilómetros de Rosario, presentan una extensa mancha marrón que alarmó a la comunidad. Esta situación, vinculada a una deficiente gestión de residuos cloacales, ha generado preocupación entre vecinos y visitantes. Expertos y autoridades advierten sobre los riesgos para el ecosistema y la salud pública.

El abogado Fabián Maggi de la Asociación Civil Foro Medio Ambiental (Fomea) informó que análisis del Departamento de Delitos Ambientales de la Policía Federal revelaron altos niveles de coliformes fecales en el agua, un escenario similar al de Rosario. Informes del fiscal federal Matías Di Lello, que incluyen estudios realizados entre 2022 y 2024, confirman la presencia de escherichia coli y otros contaminantes en el sector ribereño de San Pedro, indicando un riesgo significativo para los usuarios recreativos del río y la biodiversidad.
Infraestructura inactiva y consecuencias legales
La planta de tratamiento de efluentes cloacales de San Pedro ha estado inactiva por al menos 30 años. Actualmente, los desechos se vierten directamente en el río Paraná a través de un sistema bypass, afectando tanto al medio ambiente como a las áreas recreativas cercanas al puerto. El fiscal Di Lello destacó que la planta depuradora está fuera de servicio, lo que agrava la contaminación. La justicia federal investiga la responsabilidad del intendente Cecilio Salazar en esta situación, mientras se reúnen pruebas sobre la falta de medidas correctivas y el abandono del servicio de saneamiento.
Una problemática regional
Este caso resalta un problema que afecta a toda la región, ya que Rosario tampoco dispone de una planta depuradora de efluentes cloacales. La empresa Aguas Santafesinas (Assa) aún no ha ejecutado el proyecto necesario, pese a un fallo civil que ordena a las autoridades avanzar con la obra. La causa penal relacionada continúa en trámite ante la Cámara de Casación.