Desde hace algunos años, la ganadería cobró un importante protagonismo en los campos misioneros, con el objetivo de potenciar la actividad tanto para el autoconsumo como para la comercialización de la hacienda.
En Pozo Azul, uno de los municipios más jóvenes de la tierra colorada, buena parte de la actividad productiva giraba en torno al tabaco. Sin embargo, este tipo de cosecha se tornó insostenible y obligó a muchos productores a diversificar las actividades en los campos, en el afán de lograr una actividad que sea redituable.
En este sentido, los productores del rubro ganadero de Pozo Azul comenzaron a trabajar en distintos aspectos productivos de la actividad. Es por ello que se empezaron a llevar a cabo jornadas de capacitaciones con el objetivo de mejorar la disponibilidad de la hacienda. A esto se sumó el estudio en cuanto a los alimentos nutritivos destinados al animal vacuno, apuntando tanto a obtener buena calidad de la carne como también a ampliar la producción de leche.