El Gobierno de Estados Unidos ofreció una recompensa de hasta 10 millones de dólares por información que permita identificar a personas que trabajen para gobiernos extranjeros con el fin de interferir en las elecciones presidenciales de noviembre próximo mediante actividades cibernéticas ilegales.
El premio persigue el objetivo de identificar a quienes incurran en acciones de “fraude y abuso informático” para interferir en el desarrollo de los comicios, explicó el Departamento de Estado en un comunicado.
Las personas que eventualmente sean detectadas en actividades “maliciosas” contra la infraestructura de las elecciones o la de las campañas partidarias pueden ser objeto de proceso penal, advirtió la nota, según la agencia de noticias Europa Press.
El Departamento de Estado invocó una ley que “prohíbe el acceso no autorizado a computadoras para obtener información y transmitirla a destinatarios no autorizados”.
Fuente: Télam