Maulla, tira arañazos con sus manos y cruje sus dientes cuando se le acercan. El femicida de Mendoza, el israelí Gilad Pereg, acusado por el doble femicidio de su madre y su tía en la localidad de Guaymallén, Mendoza, declaró en el juicio en su contra y contó cómo fue que se «convirtió» en gato.
Frente al jurado que mañana definirá si lo condena, Gilad Pereg dijo que vive “100% como un gato”. La estrategia de su defensa para que vuelva a Israel.
En su relato, Pereg describió la supuesta transformación que lo llevó a haber decidido ser un animal. Su explicación está en las malas experiencia que dijo haber visto del resto de los humanos.
“Después de haber visto toda la maldad que hacen ustedes las criaturas de dos patas, decidí ser un gato. Vivo 100% como gato, como alimento, juego con los gatos y siempre he maullado. Tengo 37 gatos y estoy muy preocupado por ellos», comenzó en su explicación
«Un solo pelito de uno de mis hijos, vale más que todas las criaturas de dos patas de este mundo. Estoy muy preocupado por ellos, por lo que les puede haber pasado», habló en referencia a sus mascotas.
Y entonces volvió a criticar a la raza humana: «Todos los humanos son basura y sólo saben hacer el mal. Son el diablo mismo. Mi madre y mi abuelo eran la única excepción”, dijo.
Luego explicó la existencia de un gato “líder” que dice protegerlo y lo describió como “un gato grande, como de 50 kilos”.
La explicación que ofreció de su comportamiento como “persona” fue el de «utilizar una máscara» o «realizar una actuación».
«Yo vivía como gato todo el tiempo, estaba con mis hijos. Y cuando salía a la calle actuaba como persona. Me costaba mucho y no podía hacerlo por mucho tiempo. Podía hacerlo por media hora, pero luego volvía a mi casa a ser gato”, dijo.
La estrategia de la defensa
La defensa de Gilad Pereg adelantó que, en caso de ser declarado inimputable y que tenga que someterse a un tratamiento, solicitarán que sea «trasladado a un hospital neuropsiquiátrico en Israel».
«Estamos trabajando en conjunto con la Embajada de Israel para que Pereg, en caso de que sea considerado inimputable, sea trasladado a un hospital neuropsiquiátrico en Israel, porque entendemos que es el mejor tratamiento que puede recibir», dijo a la agencia Télam Lautaro Brachetta, uno de los abogados del israelí.
Según el letrado, el jurado popular «tendrá dos opciones: por un lado una condena en un establecimiento penitenciario, y por el otro un encierro en un establecimiento neuropsiquiátrico».
«Como defensores, no podemos pedir la libertad porque, como dijeron los peritos, es peligroso para terceros como para sí mismo, por lo tanto nuestro alegatos y nuestra intención es que él sea asistido con tratamiento adecuado en un establecimiento neuropsiquiátrico», adelantó.
Qué dijo su psicóloga
Durante la audiencia de este lunes, atestiguó la psicóloga que actualmente trata al imputado en la unidad penitenciaria del Hospital Psiquiátrico El Sauce. Ante el jurado expuso una cronología de vida de Pereg a través de lo que él mismo le fue relatando en encuentros diarios de 1 ó 2 horas que se dan desde hace poco más de un año.
“A los 7 u 8 años era un niño solitario, aislado, o jugaba y sólo se dedicaba a estudiar. A los 12 años sólo leía y repetía libros porque dudaba de haberlos leído correctamente. En la primaria lo adelantaron un año y obtuvo el mejor promedio. En la universidad se recibe de ingeniero y obtiene un doctorado. Luego, a los 23 años se alista en el ejército y allí es cuando refiere que “se le explota la cabeza” porque dice no tolerar la muerte y el daño entre personas. Allí es cuando encerrado por 8 meses le aparece un gato y es cuando inicia este proceso”, resumió la profesional ante el jurado.
Esta psicóloga reveló que de los dichos de Pereg, se desprendió su modo de actuar “como gato”. “Ya considerándose un gato, viene a la Argentina y decide actuar como persona, para poder vivir en sociedad”, dijo, para luego retomar acerca de detalles de la vida de Pereg en Israel.
“Lo que él dice es haber tenido relaciones sexuales con su madre unas 5 veces, pero no poder tener hijos, con lo que asisten a una clínica de fertilización. Allí es cuando su madre lo lleva a un psiquiátrico y él se siente traicionado por ella. Todo esto puede ser parte de la construcción del delirio. Desde Israel no nos dieron información, debimos rearmar su historia a partir de la técnica de anamnesis, que es un método científico”, señaló.
Finalmente, la profesional que lo trata hasta la actualidad en El Sauce, describió su cuadro como “un trastorno delirante crónico o parafrenia, que está en el grupo de las psicosis” y agregó: “Tiene un delirio sistematizado y si se tocan los núcleos delirantes, podría verse alterada su conducta. Si su juicio de la realidad estuviese siendo alterado, no podría estar siendo consciente de sus actos”.
El juicio, en etapa de definición
El caso de Pereg está en la etapa de definición. Este miércoles, si se cumplen los plazos procesales, podría haber sentencia.
Un jurado popular definirá si el acusado de doble homicidio será condenado a prisión perpetua (tiene que haber unanimidad en la decisión) o declarado inimputable, en caso de que se demuestre que al momento del hecho no comprendió la criminalidad de lo que hacía ni dirigió sus acciones.
En ese punto está el quid de la cuestión. Es el capítulo en el que la defensa de Pereg se concentra para tratar de liberar a su cliente de un veredicto en contra.
Los maullidos del israelí, que obligaron a la jueza a desalojarlo de la sala en la primera audiencia, sus actitudes de personaje extraño, alejado de la realidad, pero al mismo tiempo una serie de testimonios de testigos que dijeron haberlo tratado y se comportaba como una persona amable, muy preparada.
Los cuerpos de Saroussy y de Lily Pereg fueron encontrados el 26 de enero de 2019 enterrados en el fondo del predio casi abandonado propiedad del único imputado, ubicado en calle Julio Argentino Roca 6079, de Guaymallén.