Este miércoles comienza el juicio por el femicidio de Fiorella Aghem

Dia uno
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“Este 22 y 23 de septiembre gritemos todos juntos ¡Justicia por Fiorella! Que paguen los que le hicieron ese aberrante crimen, principalmente Leopoldo Borovski, que pague con la pena máxima que es la perpetua y que nunca más salga. Me quitó la vida a mí también. Te extraño hija, vivo llorando. Un beso al cielo. Tu mami”.

Mercedes Pereira Gómez es la mamá de Fiorella Itatí Aghem, la estudiante universitaria de 20 años asesinada entre la noche del jueves 28 de febrero y madrugada del viernes 1 de marzo de 2019, cuyo cuerpo fue encontrado, tres días después, semi enterrado en una chacra situada en las afueras de la localidad de San Vicente, de donde era oriunda.

Leopoldo Borovski (25), por entonces novio de Fiorella, se sentará desde mañana y durante dos jornadas en el banquillo de los acusados del Tribunal Penal Uno de Oberá para ser juzgado como autor del delito de “homicidio doblemente calificado, por el vínculo y por violencia de género”, que prevé una condena de prisión perpetua.

Su abogado defensor sostiene que es inocente y que no existen elementos de prueba para condenarlo, lo que pretende -dijo- demostrar en el debate oral. En tanto que la acusación estará a cargo de la fiscal Estela Salguero.

Según consta en el expediente de la causa, la autopsia determinó que la víctima murió como consecuencia de una asfixia por ahorcamiento provocado con un tramo de medio metro de cable de cuatro milímetros (unipolar).

Las pruebas reunidas dan cuenta que el femicidio ocurrió fuera del vehículo con el que se cree el femicida la llevó hasta La Ripiera, predio al cual se accede por un camino terrado y dista a unos 4.000 metros aproximadamente de la ruta nacional 14. Es una chacra lindante a la de los padres de Borovski.

Fue Mercedes quien había denunciado la desaparición de su hija diciendo que la noche anterior -28 de febrero del 2019- ésta salió de su hogar para ir a la casa de una compañera de estudios, pero no había regresado. Ya en ese momento desarrolló sus sospechas contra el acusado, recordando los múltiples antecedentes de violencia que había sufrido y denunciado la joven, que no fueron tomadas con seriedad por las autoridades sanvicentinas.

“Justicia por Fiorella, que no tiemble la mano de los jueces que van a trabajar en el juicio oral y público. Como madre de Fiorella no voy a parar hasta que pague por lo que hizo ese desgraciado”, adelantó hace algunos días.

El inicio de la angustiante búsqueda

El viernes 1 de marzo de 2019, la mamá de la estudiante del Profesorado de Lengua y Literatura denunció que la joven estaba desaparecida desde la noche anterior, cuando salió de su casa. Fue la última vez que la vieron con vida.

Desde un primer momento apuntó las sospechas contra Borovski, sobre quien pesaba una serie de denuncias por violencia de género contra la joven.

Incluso, la madre alertó que en una oportunidad el muchacho había amenazado con a matar a Fiorella y arrojar su cuerpo en la chacra de sus padres. Es por eso que desde un principio apuntaron sus miradas hacia dichos terrenos.

Orden judicial mediante, el domingo 3 de marzo la Policía rastrilló la propiedad, pero no halló nada.

Hallazgo en la chacra y viaje de placer del acusado

Lo peor se confirmó al día siguiente, el lunes 4 al mediodía, cuando un hombre que realizaba tares de pulverización en una plantación de yerba ubicada en cercanías a la chacra de los Borovski encontró semi enterrado el cadáver de la chica.

La noche anterior al hallazgo del cuerpo la Policía había hallado rastros de sangre en la camioneta del en ese momento sospechoso, lo que terminó de acorralarlo.

El ex de Fiorella fue detenido ese mismo lunes cerca de las 10:30 en El Soberbio, cuando apenas regresó de un encuentro de jeeps realizado en Horizontina, Brasil, a unos 70 kilómetros de la frontera. Había salido del país el viernes, horas después de cometido el crimen.

Citarán a ex un intendente y a su esposa concejal

La instrucción de la causa estuvo a cargo del juez Gerardo Casco, titular del Juzgado de Instrucción Tres de San Vicente, quien imputó a Borovski por homicidio doblemente calificado por el vínculo y violencia de género, que pena con prisión perpetua.

Además de una serie de pruebas que complican al acusado, el informe de autopsia confirmó que la víctima falleció por “asfixia por ahorcamiento por estrangulación”.

Según se estableció, el cadáver de Fiorella tenía un lazo de un cable muy ajustado alrededor del cuello; la cabeza y la cara estaban muy hinchadas por el edema producto de la estrangulación. Tenía tres cortes superficiales en el tórax, en la parte inferior del lado izquierdo, que abarcaba sólo la piel.

Por el avanzado estado de descomposición fue imposible tomar muestras para confirmar o descartar el ataque sexual. Por la presencia de gusanos llevaba entre cuatro y seis días de muerta, lo que avala la hipótesis que fue asesinada el día de su desaparición.

Fuentes del caso precisaron que entre los testigos citados para el debate oral se encuentra Waldemar Dos Santos, ex intendente de San Vicente, y su esposa, Cristina Novoa, actual concejal del municipio.

Las autoridades judiciales pretenden determinar qué rol jugó la pareja en la salida del país de Borovski, ya que también habrían asistido al encuentro de jeeps en Brasil al que concurrió el imputado mientras en Misiones buscaban a la chica y se temía que él haya escapado. Incluso, habría compartido el hotel con Dos Santos y su esposa.

También serán citados familiares y amigos de la víctima que conocen detalles de las denuncias previas por violencia de género.

Fuente: El Territorio

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