La Policía busca intensamente a Marcelo Da Rosa, acusado de matar a su pareja en San Vicente. La hermana de la víctima relató cómo el sospechoso admitió el crimen frente a familiares.
La Policía de Misiones mantiene un amplio operativo para localizar a Marcelo Da Rosa, de 53 años, señalado como autor del femicidio de Marisa Cuña en su vivienda sobre la calle Luis Pasteur 130, a pocos metros del hospital local. La víctima falleció por heridas de arma de fuego y, según testigos, el ataque ocurrió tras una discusión con su pareja en presencia de familiares.
Rafaela Cuña, hermana de la víctima, relató el dramático hallazgo: “Mi sobrino vio a la perrita dentro de la casa de mi hermana y al abrir la puerta del depósito encontró algo dentro de una bolsa negra. Me dijo que le llamó al padre: ‘Papi, vení corriendo acá, ayúdame, que yo creo que Lucas se mató’. Y su papá le respondió: ‘Es tu mamá, yo le maté. Le di dos tiros’”. Su sobrino, Lucas, padece depresión, por lo que inicialmente pensó que se trataba de un suicidio.
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Rafaela también recordó la relación de su hermana con Da Rosa: “Ya se habían separado y hecho la división de bienes. Ella esperaba mudarse el sábado y siempre le dijimos que haga la denuncia porque cada vez que quería separarse, él la amenazaba”. La mujer relató que su hermana llevaba a Lucas al colegio y luego iba al gimnasio, pero aquel día no llegó a entrenar, lo que alertó a la familia.
Tras el ataque, Da Rosa huyó en un Toyota Corolla azul (patente IHK-426), con el que trabajaba como remisero. La Policía realiza rastrillajes en San Vicente, caminos rurales y pasos fronterizos, mientras que Brasil también fue alertado ante una posible intención del sospechoso de cruzar la frontera. En la vivienda se incautaron vainas servidas y otros elementos de interés para la causa, que está a cargo del Juzgado de Instrucción Tres de San Vicente, bajo el juez Gerardo Casco.
Este crimen eleva a cinco los femicidios registrados en Misiones en lo que va del año. Rafaela Cuña expresó su dolor y determinación: “Para mí era la mujer más buena del mundo. Siempre estaba para mí y mis hijos. Ahora me toca terminar de cuidar de ella”.