La empresa dedicada a la comercialización de artículos para el hogar, electrodomésticos, electrónica e informática, próxima a cumplir 70 años, notificó vía mail a sus empleados “que no iba a tener dinero para solventar los gastos de los sueldos”. En comunicación telefónica, Claudio Ledesma, delegado de la sucursal de Merlo, advirtió que “la empresa está en proceso de venta”
El holding Garbarino está integrado por la cadena de 240 sucursales de venta en todo el país, los locales de la firma Compumundo, La Fueguina –ensambladora de electrodomésticos-, Garbarino Viajes, Garbarino Seguros, entre otras, totalizando más de 6.000 trabajadores desde la apertura de su primera tienda en 1951.
Según los empleados consultados, la difícil situación “empezó hace 10 ó 12 días, cuando la empresa realiza un adelanto de sueldo del 30% y promete que el cuarto día hábil de abril, iba a pagar la diferencia”. Claudio Ledesma, delegado de SEOCA agrega que “el gerente de cada sucursal, se comunica con cada uno de los empleados para decir que la empresa les dijo que no iba a estar esa diferencia. Sencillamente que no tenían la plata para pagarlo”, afirma.
El aislamiento social obligatorio que dispuso el gobierno, les genera a los empleados una mayor incertidumbre cuenta el trabajador de la sucursal Merlo, agregando que “luego lo hicieron vía mail y no de una cuenta propia de Garbarino, pero con la firma de presidente de la compañía Carlos García donde notificaba que no iban a tener el dinero para solventar los gastos de los sueldos”, dice.
Ledesma analiza que esto es “a raíz de una mala administración que ya venimos cargando hace más de un año, ya que la empresa sigue teniendo una gran deuda con el banco y refinanciaba esa deuda con la esperanza de que todo iba a cambiar. Lo peor es que nunca levantó la venta, y por ello no pudieron levantar esa refinanciación de los bancos”.
La empresa tiene 4.500 empleados en Garbarino y 900 empleados en Compumundo, “en si el Grupo Garbarino son como 4 o 5 empresas más. Si como mínimo hay 3 personas detrás de cada compañero, hay más de 15 mil personas que dependen de la empresa para subsistir”, detalla el delegado. “Desde el Sindicato de Comercio zona Oeste se radicó una denuncia, y lo que sabemos es que la empresa está en proceso de venta”, agrega muy consternado.
Desde la empresa están solicitando renuevan el Procedimiento Preventivo de Crisis, con la intención de “obtener el crédito flexible con el 12% que está ofreciendo el Estado en este momento para darle una mano a los empresarios que están tramitando justamente los sueldos de los empleados, por la cuarentena por el Coronavirus”, explica Ledesma.
La información a la tuvo acceso A1 Noticias, detalla que Garbarino pidió el PPC hace un tiempo para desligarse del pago de las cargas sociales y la parte tributaria. La realidad es que los bancos Galicia y Santander, son los principales acreedores de la firma en una cifra que oscilaría entre $3.000 y $4.000 millones. Por ello el CEO de la empresa, contrató los servicios de la firma First como asesor financiero, con el intento de lograr un proceso de reestructuración de deuda.
El empleado de la Sucursal de Merlo ratifica que “Garbarino está en proceso de venta y el principal interesados era Inverlat que tenía tiempo hasta el 31 de marzo para que se ejecute la operación y el 21 de marzo se bajó de la negociación”. El grupo inversor Inverlat negociaba pagar entre $1.500 millones y $2.000 millones para hacerse cargo del control total de Garbarino, algo así como U$S 31 millones de dólares.
El rumor más fuerte es que “hay dos empresas interesadas, la principal es Covelia, la que conocemos como la recolectora de residuos y esa es una de las cosas que nos puede salvar que se ejecute la venta cuanto antes. Que el nuevo dueño inyecte dinero en la empresa y que volvamos a trabajar como veníamos haciendo normalmente”, se esperanza Claudio Ledesma.
“Por ahora al estar los locales cerrados, no se pueden generar ingresos. La novedad es que la justicia autorizó que se puede vender a través de internet, así que se habilitaron el canal de venta online y la entrega a domicilio. Es la única posibilidad que con ese sistema puedan pagar los sueldos”, dice. Sobre el final advierte que “la pandemia y la cuarentena fue la frutilla del postre, si hacía falta algo para noquearnos era esto”, concluye Ledesma.
Fuente: a1 noticias