La justicia avanzó en el caso de Thiago Benjamín Correa Medina, el niño de siete años fallecido por una bala perdida en La Matanza. El fiscal Diego Rulli imputó al policía federal Facundo Aguilar Fajardo por homicidio con dolo eventual. Esta calificación agrava la posible pena y marca un distanciamiento de la legítima defensa.
El agente, quien permanece detenido, disparó más de 11 veces durante un asalto, en el que mató a un delincuente e hirió a otros. Rulli argumentó que hubo un exceso en su accionar, dada la cantidad de tiros y el lugar transitado.
Aguilar Fajardo, de 21 años, efectuó más de 11 disparos tras ser sorprendido por cuatro delincuentes que intentaron robarle. En el incidente, uno de los asaltantes murió y otros dos resultaron heridos.
Esta decisión judicial busca esclarecer las responsabilidades y dar justicia a la trágica muerte de Thiago.
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Una bala, según la investigación, rebotó e impactó en la cabeza de Thiago, quien esperaba un colectivo con su padre a unos 200 metros del lugar. El niño falleció el viernes por la noche en el Hospital de Niños de San Justo.
El fiscal Rulli cambió la carátula de la investigación de legítima defensa a homicidio con dolo eventual. La justificación de esta modificación se basó en el “exceso en la legítima defensa”, considerando la cantidad de disparos y la ubicación del hecho en una avenida pública y concurrida.
Aguilar Fajardo permanece detenido. El juez Rubén Occhipinti ordenó la ablación de órganos del niño. El padre de Thiago, Fabián Correa, publicó mensajes de despedida en redes sociales.