Desde el pasado viernes, los 252 puesteros del Mercado Modelo La Placita y los 97 de La Placita del Puente están autorizados a reanudar sus ventas de productos, aunque sólo a través de Internet y con entrega por delivery. Una modalidad con la que muy pocos de ellos están familiarizados y, de hecho, hasta ahora “sólo beneficia a un porcentaje pequeño, alrededor del 60% se queda afuera” del sistema, según advirtió al diario Primera Edición el delegado provincial del Sindicato de Vendedores Ambulantes de la República Argentina (SIVARA), Alberto Fusté Padrós.
Aunque todavía considera prematura una evaluación numérica sobre la marcha de las ventas bajo la nueva modalidad, al haber transcurrido apenas cinco días desde la autorización otorgada por la Municipalidad de Posadas con aval provincial, el referente de los puesteros ve que “para la mayoría, la propuesta es insuficiente”.
Por ejemplo, los propietarios de los puestos pueden retirar su mercadería para llevarla a sus casas y desde allí venderla online, pero “el primer problema se generó cuando muchos no tenían cómo transportar las cosas. Y por otro lado, en el mercado existe un grupo importante de adultos mayores que no saben cómo manejarse en Internet, entonces el principal obstáculo es el manejo en redes sociales”, explicó una de las históricas vendedoras de La Placita, María Eva Duarte.
Situación grave y alternativa
Por su parte, Fusté Padrós recordó que al declararse la cuarentena los comerciantes dejaron de trabajar y, como consecuencia, dejaron de percibir sus principales ingresos. “Todos tenemos deudas que pagar, entre ellas el monotributo, que sino lo pagan se quedan sin obra social y sino pagás por tres meses, te sacan definitivamente, me dejan a la gente sin cobertura médica”.
Ante la alarmante situación, sugirieron al Municipio otra metodología de trabajo, esta vez dentro de mercado, sin atención al público y respetando el distanciamiento social.
En concreto, proponen un esquema laboral a puertas cerradas: con turnos y horarios, para que al mercado concurran grupos pequeños de comerciantes que venderán por Internet. Es decir, los clientes no podrán ingresar al establecimiento.
Según el referente de los vendedores, “la idea es que tengan designado un día y horario para asistir a sus puestos. Por ejemplo: los lunes, miércoles y viernes sólo ingresarán 15 por la mañana y en puestos distantes, respetando el protocolo y bajo medidas de seguridad e higiene. Por la tarde, otro grupo de 15. En tanto que los martes, jueves y sábado podrá ingresar el otro grupo; por la mañana 15 y por la tarde los otros 15”.
“Lo que quiere la mayoría es volver a sus puestos y desde allí vender online. Ese pedido ya lo hicimos y por estas horas se está analizando, esperamos una respuesta favorable”, dijo Fusté Padrós.
Los vulnerados
Por otro lado, María Eva Duarte se preguntó “qué pasa con los ayudantes de los puesteros. Yo quiero hablar por ellos, que viven del día a día y muchos son del interior o de Paraguay, alquilan una pieza y no tienen ayuda de nadie.Lo que quiero decir es que no somos sólo los comerciantes los afectados: están los que nos ayudaban en nuestra tarea y ahora se encuentran completamente solos. Tenemos un sentimiento amargo, está todo desolado y vacío, en mi vida vi a la Placita de ese modo”, sentenció.