El protocolo, con acciones específicas y medidas proactivas de prevención, adopta las indicaciones promovidas por el gobierno y que obliga a los organismos oficiales a reflejar estas iniciativas en sus normativas, informó la entidad.
La iniciativa busca “detectar y erradicar todo acto violento ejercido contra mujeres y personas LGBTIQ+ (lesbiana, gay, bisexual, transgénero, transexual, travesti, intersexual y queer),, cuando se utilizan descalificaciones o se ejercen maltratos basados en su condición de género”.
En este sentido, Cecilia Fernández Brugna, integrante del Directorio del BNA, consideró que “el protocolo da cuenta de un compromiso muy fuerte a erradicar la violencia de género y todo tipo de violencia en el ámbito laboral”.
Para Fernández Brugna, “esta violencia toma la forma también de comentarios, ‘chistes’, decisiones, prejuicios, gestos, acciones, situaciones, frecuentemente muy arraigados; no queremos naturalizarlos ni que ningún trabajador o trabajadora los sufra en el Banco».
El nuevo Protocolo, que actualiza el que estaba vigente desde 2018, tiene como fundamentos el diseño, ejecución y evaluación en materia de prevención y erradicación de las violencias de género y la adopción de nuevos mecanismos para el tratamiento de las denuncias que se reciban, reemplazando el tradicional abordaje administrativo.
Con el fin de crear un ambiente laboral libre de discriminación, hostigamiento y violencia, los nuevos mecanismos para el tratamiento de las denuncias que se reciban sobre segregaciones sufridas con razón o base en el género, orientación sexual y/o identidad de género, tienen como respaldo una consideración profesional y especializada.
A partir de ahora se impulsará la información, formación y capacitación en todo el territorio nacional de las políticas públicas destinadas a igualdad y diversidad con el objetivo de impulsar la autonomía de las mujeres y las personas LGBTIQ+.
«El cambio cultural es condición necesaria de la igualdad que debe generarse en nuestra sociedad y lo promoveremos observando la detección temprana de situaciones de violencia, para brindar capacitaciones obligatorias a través de personal idóneo y actualizado permanentemente en la temática, partiendo siempre de brindar un espacio seguro de respeto y confidencialidad que evite la revictimización de la persona afectada y el resguardo de su voluntad”, señalaron las autoridades del banco.
Fuente: Télam