Transcurridos dos meses desde la paralización total del transporte de pasajeros de media y larga distancia en todo el país, la firma Río Uruguay hizo llegar a las autoridades de Misiones y Corrientes una amplia propuesta de protocolo, a título individual, a la espera de que los respectivos comités de crisis la tomen en cuenta para la reactivación paulatina del sector.
“El protocolo está encaminado a garantizar la cuestión sanitaria, tanto en la parte empresarial, en lo que hace a los pasajeros y también al Estado, porque son tres patas que tienen que convivir”, explicó el propietario de Río Uruguay, Darío Skrabiuk, a la FM 89.3 Santa María de las Misiones.
El empresario detalló que la propuesta “arranca por la parte de la empresa, donde el personal que llega directamente tiene que pasar por una cabina sanitizante y todos los protocolos, por ejemplo pisar una alfombra con dilución de lavandina y desinfectante. También se desinfectan las unidades y, una vez que está todo comprobado, las unidades y el personal quedan en condiciones para salir a trabajar”.
“El personal también va a tener que firmar una declaración jurada y si llega a tener temperatura deberá volver directamente a su domicilio. Tampoco podrá trabajar si alguno de sus familiares tiene algún síntoma compatible con COVID-19”, agregó.
Con respecto a los usuarios, precisó que “cuando se hace la venta de pasajes se les va a hacer firmar una declaración jurada y antes de subir al colectivo se les tomará la temperatura. Si alguno tiene (más de 37,5º), no va a poder abordar”.
En los colectivos “la distancia será como mínimo de un metro y medio entre pasajero y pasajero, entonces las unidades no van a poder ir a su ocupación total, sino a un 60%, tal como establece el protocolo que ya había elaborado la CNRT (Comisión Nacional Reguladora del Transporte) y que se está poniendo en práctica” en el transporte urbano y de corta distancia, que es el único habilitado hasta ahora en el país.
Y en cuanto a recorridos, advirtió que -en caso de ser aprobado el protocolo- los pasajeros sólo van a poder ascender en las terminales de ómnibus, “por eso hay que coordinar también con los municipios, que deben aprobar que esto sea así. Por ejemplo, cada terminal también va a tener que estar adaptada, porque tampoco van a poder ir a despedir a cada pasajero: sólo éste va a ingresar al andén y él mismo será quien vaya a cargar su bolso en la bodega. Luego va a descender en la terminal de ómnibus de la localidad a la que se dirige, no en cualquier parte de la ruta, porque si no, se va a perder el control del pasajero”, argumentó.
Consultado si es redituable el servicio solamente con el 60% del pasaje, Skrabiuk admitió que “nosotros estamos con una desesperación total, porque el sistema está totalmente parado y de alguna manera tiene que arrancar, aunque sea paulatinamente. Existe esa necesidad por parte de las empresas y también de los usuarios, que no tienen cómo trasladarse. Ya venimos parados 60 días y estamos esperando que el comité (de crisis) evalúe el protocolo y diga si hay que agregar o sacar cosas, pero había que empezar por algo, no podíamos seguir así y tampoco cargar toda la responsabilidad al Estado”, sentenció el empresario.
Claves para el usuario
• Se ubicará a los pasajeros dentro de los vehículos a distancia prudencial entre ellos y siempre teniendo en cuenta las limitaciones del 60% de ocupación.
• Al momento de vender un pasaje se debe solicitar, además de los datos ya exigidos por la normativa vigente, el número de teléfono donde se pueda localizar al pasajero con posterioridad al viaje.
• Cada pasajero deberá someterse al control de temperatura corporal tanto en el ascenso como en el descenso de la unidad.
• Deberá completar una declaración jurada sobre su estado de salud, en la cual figure el control de temperatura corporal efectuado.
• Será obligatorio para el ingreso a la unidad el uso de tapabocas.
• Los pasajeros no podrán descender en las terminales intermedias que no sean su destino final.
• Se recomendará a los pasajeros que eviten en lo posible moverse de sus asientos, pero de ser necesario usar el baño, antes de retirarse deberá utilizar los elementos de higiene y desinfección provistos por la empresa.
• El vehículo deberá circular durante todo el viaje en forma ventilada. Se retirará de las unidades todas las cortinas, visillos y demás elementos de tela, a excepción de los tapizados.
• Si algún pasajero presenta síntomas, se lo aislará lo más rápido posible del resto de los pasajeros, con una distancia de seguridad de al menos 3 metros. El chofer deberá comunicarse de inmediato con la autoridad pública para recibir las instrucciones que correspondan.
Fuente: Primera Edición