El uso del ácido traxenámico es múltiple: puede ser útil en traumas agudos, en el parto, en el embarazo, en la menstruación, en enfermedades de la coagulación e incluso tiene un uso estético.
¿Sabes qué es el ácido traxenámico? Esta droga descubierta hace ya sesenta años tiene numerosos usos, todos apuntados a disminuir las hemorragias de diversas causas. Se aplica en problemas de salud muy variados, algunos de ellos con riesgo de vida y otros mucho más leves, incluso tiene un uso estético valioso.
Como todo medicamento debe ser administrado por el médico y tiene efectos secundarios y pautas de uso que tu médico te indicará.
Sus acciones
El ácido traxenámico actúa para mejorar la coagulación de la sangre, es un antifibrinolítico, derivado sintético del aminoácido lisina. Evita que las enzimas del cuerpo destruyan los coágulos de sangre. Esto puede ser crucial en pacientes hemofílicos que deben someterse a una cirugía, por ejemplo. También puede administrarse a mujeres con hemorragias menstruales excesivas. Su uso estético, que se aplica hace relativamente pocos años, se debe a que disminuye el melasma, un trastorno de pigmentación de la piel que aparece durante el embarazo. En este caso se aplica en forma tópica. Pero tiene usos en casos graves, donde su administración apunta a parar la pérdida de sangre que pone en riesgo la vida.
En el parto
La hemorragia posparto es la principal causa de muerte materna en el mundo: se estima que cada año, 100.000 mujeres mueren desangradas poco después del parto, una cada 6 minutos. Aunque la mayoría de los decesos ocurren en países de ingresos bajos y medios, la hemorragia posparto también es una de las principales causas de mortalidad materna en aquellos con economías más desarrolladas.
Sin embargo, estos índices pueden reducirse hasta un 30% según la OMS a partir del suministro temprano del fármaco llamado ácido tranexámico, aumentando significativamente las posibilidades de salvar las vidas de las madres que experimentan esta complicación conocida como “la pesadilla de los obstetras”.
En traumatología
Asimismo, el medicamento también es clave en situaciones de trauma agudo. Un porcentaje elevado de personas que sufren accidentes en la calle, mueren en las primeras horas como consecuencia de hemorragias o por complicaciones derivadas de las transfusiones. Generalmente, los accidentados presentan lesiones muy graves en las zonas del cráneo, la columna vertebral o el tórax; hasta lesiones multiorgánicas o politraumatismos. La pronta administración de ácido tranexámico a
los pacientes puede ayudar a aminorar la gravedad del sangrado y mejorar su coagulación hasta la resolución mecánica del cuadro.
Por otro lado, permite reducir la cantidad de transfusiones de sangre y los riesgos que estas conllevan, además de reducir los costos que este tipo de prácticas significan y la acentuada falta de donantes –algo que se profundizó en los últimos años por la pandemia y que es una problemática que hoy aqueja tanto a hospitales del sector público como privado.