Nunca como en estos últimos años y en el territorio de Punta del Este, propicio durante el verano para las exhibiciones artísticas, los uruguayos y argentinos han destinado tantas y tan grandes inversiones al arte. Para comenzar, cerca de las playas de Manantiales, el MACA, el Museo de Arte Contemporáneo Atchugarry, abrirá el sábado las puertas del formidable edificio que evoca la forma de una ballena y lleva la firma de Carlos Ott, célebre por su diseño de la Ópera de la Bastilla y el Aeropuerto Laguna del Sauce de Punta del Este. La Fundación Atchugarry presentará la muestra “Christo & Jeanne-Claude en Uruguay”. La retrospectiva de los genios del Land Art que acaban de sorprender al mundo al envolver el Arco de Triunfo de París, llega por primera vez a Sudamérica de la mano de su sobrino.
En el museo, Silvana Neme, la mujer del escultor Pablo Atchugarry, mentor de la Fundación y conocido por sus abstracciones realizadas con el mármol más inmaculado de Carrara, señala la esfera de Julio Le Parc, motivo de orgullo para el MACA. Suspendidos desde el techo, tres mil cuadrados de acrílico transparente color naranja brillan como una joya con sus más de cuatro metros de diámetro. Los dibujos y pinturas de Torres García, Figari y Rafael Barradas, figuran entre las mejores piezas de la colección Atchugarry, rica en obras de los uruguayos Carmelo Arden Quin, José Pedro Costigliolo, Washington Barcala y, entre otros, de Miguel Ángel Pareja, además de los argentinos Luis Tomasello y César Paternosto, los brasileños Vik Muniz y Ernesto Neto y los estadounidenses Frank Stella y Peter Halley, entre otros. En el inmenso parque de esculturas a cielo abierto y frente a la capilla se divisan las formas inconfundibles de Enio Iommi, Gyula Kosice y Alicia Penalba.
Fuente: Ambito