La Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA), a través de la Aduana, desarticuló una maniobra de contrabando llevada a cabo por dos ciudadanos argentinos que intentaban ingresar mercadería al país en forma ilícita, oculta en un doble fondo de su automóvil.
La Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA), a través de la Aduana, desarticuló una maniobra de contrabando llevada a cabo por dos ciudadanos argentinos que intentaban ingresar mercadería al país en forma ilícita, oculta en un doble fondo de su automóvil.
El hallazgo del contrabando se produjo durante tareas de control llevadas a cabo en Puerto Iguazú, en la frontera con Brasil.

El procedimiento comenzó con el arribo de un vehículo con patente argentina al carril de ingreso al país del Puente Internacional Tancredo Neves. Durante la inspección del rodado, conducido por un hombre y una mujer que declararon provenir de Paraguay, agentes de la Aduana de Iguazú detectaron un doble fondo con una estructura de hierro, oculto bajo alfombras que simulaban ser una tercera fila de asientos.
Allí, llevaban ocultos 71 teléfonos de alta gama, 14 relojes inteligentes, 6 auriculares, 62 memorias USB y más productos de tecnología.


En la causa interviene el Juzgado Federal de Eldorado, a cargo de Miguel Ángel Guerrero. Durante el operativo de control, se procedió al secuestro de la totalidad de la mercadería, cuyo valor estimado asciende a $ 23.500.000, mientras que el juzgado instruyó el secuestro del vehículo, valuado en otros USD 15 mil.