La Policía de Guatemala reprimió este domingo con gas lacrimógeno y logró frenar a una caravana de miles de hondureños que se dirigía a Estados Unidos, potencia con la que el país, al igual que sus vecinos, firmó un acuerdo para detener el flujo constante de migrantes y refugiados.
Contingentes policiales y militares cercaron a los migrantes en una ruta del poblado de Vado Hondo, en el departamento Chiquimula, en la frontera con Honduras, informó la agencia de noticias AFP.
En uno de los tantos videos que comenzaron a circular en las últimas horas por las redes sociales se muestra cómo un hombre lleva sobre los hombros a su hijo, un niño de 11 años que padece parálisis cerebral, e intenta cruzar la formación de policías.
“Si me quieren golpear, golpéenme, pero yo voy a pasar, porque no quiero quedarme en Guatemala, no quiero venir a contaminar a la gente, yo solo quiero cruzar y lamentablemente esta es la calle que me conduce a donde yo quiero llegar”, grita el hombre, oriundo del departamento hondureño Cortés.
“Solo tengo una opción y es pasar para allá, no quiero regresar; tengo 11 años intentando ver qué puede suceder con él (señala a su hijo), pero no mejora la salud; cinco años nos llevó conseguir su bastón, tuve que venir porque no tengo nada más que hacer”, añadió.
“Entiendo la labor que están haciendo los militares, pero si yo fuera militar y estuviera en esta situación, primero miraría porque algún día podría estar en mi misma situación y necesitaría llegar a algún lugar”, manifestó el hombre, detrás de su barbijo, en el video difundido por Telesur.
Fuente: Telam