Tras días de búsqueda, la Policía dio con el cuerpo de la joven desaparecida en Jardín América. La causa apunta a un presunto femicidio, mientras continúan los procedimientos para esclarecer el hecho.
La Unidad Regional IX de Jardín América intensifica las investigaciones tras el hallazgo del cuerpo de Priscila Cecilia Díaz, de 20 años, en la mañana de este jueves. La identificación fue posible gracias al reconocimiento de la madre de la víctima, quien había denunciado su desaparición el día anterior. La última vez que se la vio fue el sábado, según sus familiares.
Durante un allanamiento realizado esta tarde en la vivienda de los principales sospechosos, ubicada en el barrio Los Cedros, los agentes secuestraron prendas de vestir y un celular, que será sometido a peritajes ordenados por el juez a cargo de la causa. Los dos hermanos detenidos, de 21 y 17 años, permanecen a disposición de la justicia, con la sospecha de haber participado directa e indirectamente en el crimen.
El juez de Instrucción Roberto Sena, encargado de la investigación, destacó en el programa “Policiales” de Misiones Online: “Lo que tenemos son testimoniales sobre el hermano mayor, que habría sido uno de los últimos que estuvo con la víctima con vida, consumiendo bebidas el domingo a altas horas de la noche”. Con respecto al menor de los hermanos, Sena explicó que su implicancia sería distinta, “por el momento, no está vinculado directamente con el hecho, sino que le cabría otra participación como encubridor”.
A través de los testimonios recabados, se ha establecido que Priscila habría compartido tragos con el presunto agresor el pasado domingo, antes de desaparecer. Según el magistrado, el cuerpo se encontraba semienterrado y presentaba un avanzado estado de descomposición, lo que sugiere que la joven podría haber sido asesinada al menos dos días antes del hallazgo. “Habrá estado bajo tierra un mínimo de dos días porque ya tenía un estado de descomposición bastante avanzado, y cotejando con el momento de la desaparición de ella, que sería el domingo a altas horas de la noche, tenemos un intervalo de casi cuatro días”, indicó Sena.
El hallazgo se produjo tras un operativo de rastrillaje en la zona indicada por un familiar de los detenidos. “Se siguieron las averiguaciones y pudimos determinar otro posible lugar. El jueves, con un intenso rastrillaje realizado por la policía, se pudo dar con el lugar en donde estaba esta chica enterrada”, precisó el juez.
El hermano menor del acusado fue trasladado al CE.MO.AS de Puerto Rico, donde permanecerá alojado por supuesto encubrimiento. El testimonio que condujo al hallazgo provino de un familiar de los sospechosos, quien denunció ante la policía que su pariente habría confesado el asesinato sin identificar a la víctima en ese momento. “La denuncia la radica porque él le habría dicho que había matado a una persona y entonces, asustada, concurre a la policía a formalizar”, agregó Sena. En un principio, ni siquiera se tenía certeza del sexo de la víctima.
Por su parte, el juez espera los resultados de la autopsia para confirmar si, además del homicidio, hubo abuso sexual, ya que el cuerpo fue encontrado desnudo y sin rastros de las prendas de la joven en las inmediaciones. El procedimiento forense será clave para determinar la causa de la muerte y si se cometieron otros delitos. “Todavía no tengo nada concreto, eso va a depender de la autopsia. Hay una presunción de posible abuso, ya que el cuerpo estaba desnudo. Es una hipótesis que tenemos que confirmar”, subrayó.
Las prendas incautadas durante el allanamiento corresponden al joven acusado, y se realizarán estudios de ADN para buscar posibles rastros biológicos de la víctima que refuercen la hipótesis de su participación en el hecho. “Sobre estas pruebas se van a hacer cotejos de ADN para ver si se encuentran restos de material biológico de la chica”, concluyó el juez.
El magistrado prevé convocar al principal sospechoso a declarar la próxima semana, a la espera de los resultados forenses y del cierre del sumario policial.