«Un punto débil del acuerdo es que las violaciones de las normas ambientales no se sancionan con la misma severidad que las violaciones de las normas comerciales», argumentó.
Para Schulze, este desequilibrio debe ser corregido y abogó por que sean también acordadas las reglas correspondientes: En el derecho mercantil, las normas ambientales «ya no deben ser sólo normas de segunda clase».
La UE y los países del Mercosur quieren crear mediante el acuerdo la mayor zona de libre comercio del mundo.
Sin embargo, la canciller alemana Angela Merkel también expresó su escepticismo sobre la firma del acuerdo comercial en vista de la continua deforestación de la selva tropical, completó DPA.