El saldo fue el más bajo del año ya que las importaciones se dispararon más de 20% mientras que las exportaciones sufrieron la caída interanual más profunda de 2020.
Principalmente se destacaron las importaciones de bienes de capital y sus respectivos accesorios, que crecieron un 31,4% y un 13,9%, respectivamente. Entre los primeros resaltó un gasto adicional de u$s37 millones en máquinas automáticas digitales y portátiles para el procesamiento de datos.
Paralelamente, los bienes intermedios, el principal rubro de importación, exhibieron un salto del 31,5%, traccionado principalmente por mayores importaciones de porotos de soja destinados para la industria.
Por el otro lado, las exportaciones sumaron unos u$s4.385 millones, un 25,6% (u$s1.508 millones) menos que en el mismo período de 2019. Esta contracción fue explicada, de manera similar a lo que había ocurrido en octubre, por un derrumbe en las ventas de productos primarios.
En esta ocasión, los envíos de dichos productos mostraron una reducción interanual del 51,5% (u$s-810 millones) debido, fundamentalmente, a una menor exportación de semillas, frutos oleaginosos y cereales.
Esto provocó que dicha división, que suele ser la más preponderante entre las ventas a otros países, pasara a ocupar el tercer lugar, incluso detrás de las Manufacturas de Origen Industrial (MOI), que en noviembre se desplomaron un 40,6%.
En ese sentido, más de la mitad de las exportaciones provinieron de Manufacturas de Origen Agropecuario (MOA), rubro que tuvo un repunte anual del 11%. Las ventas de grasas y aceites explicaron casi la totalidad de esta mejora.
En cuanto a los principales socios comerciales, Brasil se mantuvo a la cabeza con un intercambio bilateral equivalente a u$s1.607 millones y un déficit para Argentina de u$s165 millones. Detrás le siguió China, país con el que se percibió un rojo de u$s504 millones, producto de un derrumbe de casi 60% en las exportaciones y un crecimiento del 38,6% en las importaciones.
Los principales superávits se dieron en el comercio con India (u$s174 millones), Vietnam (u$s167 millones) y Chile (u$s162 millones).
De esta forma, a lo largo de los once primeros meses del corriente año el país acumula un superávit comercial de u$s12.492 millones, frente a los u$s13.749 millones de igual período de 2019.
FUENTE: AMBITO